VIAJES EN LA EDAD CONTEMPORANEA: DESDE 1789
La revolución Francesa y La Revolución Industrial Inglesa son dos acontecimientos que van a marcar los inicios de lo que se denomina Edad Contemporánea y que van a cambiar la estructura social, económica y política del mundo.
Se desarrolla una clase burguesa con altos niveles de ingresos.
Las ciudades continuaron creciendo. Se multiplicaron los centros recreacionales. Las tiendas grandes se multiplicaron. Se construyeron en París el Jardín de Invierno y el Salón de Recreos. Se expandieron los restaurantes, se inicia el Gran Teatro de la Opera de París, se Inaugura la Biblioteca.
La clase media comienza a vivir la “Belle Epoque” y los deportes se convierten en centros de atracción. El billar se juega en las casas de la alta sociedad. El mismo rey Luis XV tenía uno en su palacio, donde gastaba horas con sus amigos y súbditos.
El futbol se expande en Europa. El boxeo se convierte en un deporte atractivo. El tenis es practicado por la alta sociedad. El cricket es un juego para divertir a los ricos. El golf, como siempre, se convierte en un deporte de élite. La bicicleta sirve para transportar de manera rápida y el velocípedo también se utiliza como medio de transporte deportivo. El baseball comienza a armar furor en todo el territorio norteamericano. Y por último, vuelven a partir de 1896 las tan añoradas olimpiadas.
Con ello el turismo deportivo toma un auge considerable y su desarrollo es imparable.
Se organizan exposiciones, ferias, festivales de todas las clases, congresos, convenciones, eventos éstos que necesariamente contribuyen a aumentar la frecuencia de los viajes. Con ello nace el turismo de convenciones.
El futbol se expande en Europa. El boxeo se convierte en un deporte atractivo. El tenis es practicado por la alta sociedad. El cricket es un juego para divertir a los ricos. El golf, como siempre, se convierte en un deporte de élite. La bicicleta sirve para transportar de manera rápida y el velocípedo también se utiliza como medio de transporte deportivo. El baseball comienza a armar furor en todo el territorio norteamericano. Y por último, vuelven a partir de 1896 las tan añoradas olimpiadas.
Con ello el turismo deportivo toma un auge considerable y su desarrollo es imparable.
Se organizan exposiciones, ferias, festivales de todas las clases, congresos, convenciones, eventos éstos que necesariamente contribuyen a aumentar la frecuencia de los viajes. Con ello nace el turismo de convenciones.
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