Cuando escucho la palabra Cáncer, siento como si llegara de pronto una abalancha de recuerdos a mi cabeza, sobre la agonía de vida que esta enfermedad causó a mi querido primo hermano Héctor José, quien con apenas 14 años de edad afrontó hasta el último de sus días...
Yo me pregunté tantas veces... Porque a él, Dios mio..?? Por que tanto sufrimiento??
Ya han pasado 7 años y aún me parece que fue ayer... Cuando estaba en aquel pasillo del hospital, sentada en el suelo, junto mi prima y sus amigos... Veía mi Tío en un rincón, con el corazón destrozado y la frente pegada a la pared de aquella fría noche. Tío apretaba el puño, daba golpes a la pared, como quien tiene sed de justicia y no es quien para hacerla... Al otro lado de la pared estaba mi primito. Yo entre a verlo un instante... Recuerdo que le llevé unas tarjetas de sus muñequítos favorito ( Gokú ); el los reconoció al instante... Aunque ya casi no se le entendía lo que hablaba... Tenia los ojos orbitados y su boca reseca, también le habían puesto unos tubos en la nariz le hacían respirar con dificultad... Fue terrible para mi verlo así... Se me hizo un nudo en la garganta y preferí salir de la habitación... La presencia de nosotros allí era lo único que perturba y no lo dejaba irse tranquilo. El doctor les pidió a todos que salieran de la habitación... Ese día solo estaban esperando su hora. De nada valió que le amputaran la pierna, de nada valieron las quimioterapias, de nada valieron las oraciones....
Nadie conoce los misterios de Dios... Y Bendito sea! Si lo El lo quiso así.
Ruego a Dios por todos aquellos que padecen Cáncer Dios tenga misericordia... Amén.
Ya han pasado 7 años y aún me parece que fue ayer... Cuando estaba en aquel pasillo del hospital, sentada en el suelo, junto mi prima y sus amigos... Veía mi Tío en un rincón, con el corazón destrozado y la frente pegada a la pared de aquella fría noche. Tío apretaba el puño, daba golpes a la pared, como quien tiene sed de justicia y no es quien para hacerla... Al otro lado de la pared estaba mi primito. Yo entre a verlo un instante... Recuerdo que le llevé unas tarjetas de sus muñequítos favorito ( Gokú ); el los reconoció al instante... Aunque ya casi no se le entendía lo que hablaba... Tenia los ojos orbitados y su boca reseca, también le habían puesto unos tubos en la nariz le hacían respirar con dificultad... Fue terrible para mi verlo así... Se me hizo un nudo en la garganta y preferí salir de la habitación... La presencia de nosotros allí era lo único que perturba y no lo dejaba irse tranquilo. El doctor les pidió a todos que salieran de la habitación... Ese día solo estaban esperando su hora. De nada valió que le amputaran la pierna, de nada valieron las quimioterapias, de nada valieron las oraciones....
Nadie conoce los misterios de Dios... Y Bendito sea! Si lo El lo quiso así.
Ruego a Dios por todos aquellos que padecen Cáncer Dios tenga misericordia... Amén.
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